Cómo elegir los mejores colores para tus presentaciones
Elementos gráficos para presentaciones

¿Cómo escojo la paleta de colores perfecta para mi presentación?

En una presentación es tan importante el texto que se lee como lo que dices o lo que se ve. Por eso, si cuando hablas en público debes prestar una especial atención al lenguaje gestual,cuando estés preparando la presentación que te acompañará en tu exposición tendrás que escoger la paleta de colores adecuada. Tenemos una serie de plantillas para presentaciones clasificadas por colores, pero no podemos limitarnos a escoger una sin más, hay que elegir los colores de la presentación a partir de una serie de parámetros o criterios.

Criterios para elegir los colores de las presentaciones

Al igual que es importante escoger bien los tipografías en una presentación para garantizar la comprensión del contenido, a la hora de trasladar un discurso a este formato debemos tener en mente que existen una serie de recursos gráficos que pueden hacer una presentación más atractiva y visual o todo lo contrario. Por ello es esencial prestar atención a una serie de indicaciones a la hora de pensar y escoger la paleta de colores de la presentación.

1. Acertar con el color del fondo

El primer aspecto en el que nos fijaremos es la iluminación y el tamaño de la sala donde vamos a realizar la presentación, un aspecto clave para el fondo de las diapositivas. Si la sala es grande, tiene poca luz o podemos regularla, lo ideal sería apostar por un fondo oscuro. En cambio, si estamos en un espacio reducido o muy luminoso nos quedaremos con el fondo claro. Eso sí, no utilices un blanco puro, intenta reducir el brillo del blanco de fondo para evitar cansar la vista del público. Con un fondo oscuro no tendrás ese problema.

2. Escoger los colores que mejor combinen

En una presentación profesional para el fondo elegiremos colores suaves como el propio blanco, el gris, el crema o el azul. Se trata de colores que nos permiten una lectura cómoda y ofrecen una buena combinación con el texto y las figuras incluidas en la presentación. Este será nuestro segundo criterio a la hora de elegir los colores de la presentación, y nos lleva a descartar opciones como el amarillo, el naranja o el rojo, tonos muy chillones y agresivos que dificultan tanto la lectura como el contraste con los gráficos o tablas que se inserten en las diapositivas.

3. Favorecer el diseño con colores que contrasten

El tercer criterio para acertar con el uso de este recurso gráfico de la presentación es elegir unos colores que nos permitan hacer contraste entre ellos. Se parece al anterior, pero aquí nos centramos única y exclusivamente en el color del fondo y el del texto. De nuevo el objetivo será facilitar la lectura a nuestra audiencia y a nosotros mismos, por lo que la primera decisión será prescindir de los colores llamativos o brillantes, que cansan la vista. Cuando el fondo sea claro, utilizaremos un color oscuro para el texto y viceversa, de forma que el contraste sea evidente y el lector no tenga que forzar la vista.

4. Evitar los colores con una carga negativa

Otra cosa a tener en cuenta para escoger la paleta de colores de una presentación será eliminar los colores prohibidos, ya sea por razones técnicas o por cualquier connotación negativa que puedan tener. Si nos centramos estrictamente en las cuestiones técnicas, nos encontramos con que un color a priori tan poderoso como el rojo se difumina al proyectarlo, perdiendo intensidad. No vamos a entrar en las políticas de casa empresa, pero es cierto que algunas compañías tienen vetados algunos colores por las razones que sean, así que evitaremos su uso en las presentaciones.

5. Usar los colores corporativos de la empresa

Hay un último criterio a la hora de elegir los colores de la presentación, en cierto modo relacionado con esto último, que es utilizar los colores corporativos de la empresa en la presentación. Quizá la propia empresa cuente con su propia plantilla donde incluya la paleta de colores a utilizar, así que lo único que tendrás que hacer es elegir los colores que mejor contraste nos ofrezcan, siempre dentro de esos estándares de la compañía, y utilizarlos en las diapositivas.

Ahora que ya conoces los diferentes criterios que nos ayudarán a elegir los colores de la presentación, solo tienes que abrir las diferentes plantillas cromáticas y preparar las diapositivas. No olvides que la elección de colores debe ser coherente y mantenerse a lo largo de toda la presentación. Si quieres mantener la imagen de seriedad, los colores no pueden cambiar de una a otra diapositiva.