Cada vez que nos enfrentamos a un proyecto seguimos el mismo ritual de preparación, y dentro de este ritual podemos incluir el moodboard. Es una forma más de recopilar toda la información que se necesita para la preparación del proyecto, y las presentaciones no son ninguna excepción. Antes de descargar las plantillas de presentación tendremos que saber qué tipo de presentación tenemos que preparar o qué información tenemos, de modo que elijamos bien. Y aquí es donde aparece el moodboard en una presentación.
¿Qué es un moodboard?
La traducción literal de moodboard es “tablero de inspiración”, lo que nos permite hacernos una idea de lo que tenemos delante. El moodboard nos permite recopilar la información de modo gráfico y visual, permitiéndonos exponer conceptos, buscar ideas para decidir la línea gráfica que va a seguir nuestra presentación, etc. Sus detractores dicen que es una herramienta estéril, pero una vez que la probamos descubrimos las muchas ventajas que tiene el uso del moodboard, y llegará un punto en que no puedas trabajar sin moodboard.
5 ventajas de usar un moodboard en tu presentación
La principal razón por la que utilizaremos un moodboard es porque nos facilita los inicios de cada presentación. Seguro que cuando te encargan la realización de la presentación empiezas a tener una serie de ideas, como también las tiene el resto de tus compañeros o el cliente. El moodboard nos permite reunir en un mismo lugar todas esas ideas, de modo que nos será mucho más fácil empezar a preparar las diapositivas. Si todavía dudas, vamos a ver los principales beneficios de utilizar un moodboard en una presentación.
1. Filtrar la información
Tanto si tienes poca información y tienes que buscarla como si nos han proporcionado un exceso de información para la presentación, el moodboard nos permite filtrar toda la información que nos ha llegado y quedarnos con la más importante. Pero no solo eso, también nos permite recopilarla de forma muy visual, de modo que rápidamente encontremos lo que estamos buscando.
2. Facilita la comunicación
Una de las claves para el éxito de cualquier proyecto es la comunicación, tanto con el resto del equipo encargado de la presentación como con el “cliente”, aunque en este caso sea alguien de la propia empresa. A través de las imágenes que hay en el moodboard podemos transmitir todo lo que queremos enseñar, y hacerlo de forma eficiente. Así, se señala el camino a seguir y todo el mundo está al tanto del trabajo que se realiza.
3. Aporta confianza
El moodboard nos aporta confianza, ya que puede ser una excelente hoja de ruta. Pero también es un aval de confianza para el exterior, ya que en todo momento dejamos claro que sabemos en qué fase de la presentación estamos y cuál es el objetivo.
4. Puede ser digital o físico
No importa el formato que quieras, puedes diseñar el moodboard tanto física como digitalmente. En caso de hacerlo digital, existen herramientas online para crear moodboards o tableros de tendencias como Niice, Canva, Photoshop o Pinterest nos permiten organizar varias ideas y plasmarlas todas juntas. Si utilizas un moodboard físico tenemos un sinfín de opciones, desde el clásico tablón de corcho a una pared o cartulina, sistemas de perchas, tarjetas… la creatividad no tiene límites.
5 Es una herramienta muy clara
Hemos dejado la claridad para el final, pero esto no significa que sea menos importante. De hecho, seguramente sea la gran ventaja de usar un moodboard en una presentación. El moodboard es muy claro en varios sentidos, empezando porque nos ayuda a aclararnos antes de empezar, cuando la presentación no es más que un lienzo en blanco y no sabemos por donde comenzar. Nos ayuda a hacernos una idea, a destacar lo importante; y también es una guía muy clara para cualquier persona que esté involucrada en la presentación o el proyecto donde lo utilizamos.