Si en ocasiones enfrentarnos a una presentación en público nos da vértigo, la cosa se complica si esta exposición oral es en inglés. Sin embargo, vivimos en un mundo cada vez más global, y no es raro que tengas que presentar datos, proyectos o ideas a un público extranjero, y que además tengas que hacerlo en inglés. No es lo mismo hacerlo de forma presencial en un encuentro de trabajo que en una reunión online, por ejemplo por Skype; pero sí que hay una serie de trucos para afrontar una exposición oral en inglés.
Cómo enfrentarse a una exposición en inglés
A la hora de preparar una presentación oral en inglés debemos tener claros una serie de aspectos. Antes de fijarnos en cuestiones más lingüísticas, hay que fijarse en la forma. No es lo mismo hablar ante un público español que ante un público inglés, estadounidense o de otro país donde el inglés tampoco es el idioma nativo. Por eso, lo primero que haremos será fijar el objetivo de la exposición -algo que también haremos cuando sea en español y asegurarnos de saber qué público tendremos. Una cosa son los directivos, donde nos centraremos en soluciones, éxitos y logros y otra un público especializado que exige una exposición más técnica.
Una vez definido este aspecto, preparamos la estructura y las partes de la presentación del mismo modo que si la exposición fuese en nuestro propio idioma. En este sentido, podemos tener una deferencia hacia nuestro público, en especial si son nuestros anfitriones, modificando ligeramente este orden para que se adapte a lo que están acostumbrados. Si son ellos los que visitan nuestra empresa, delegación o sede también podemos seguir esta estrategia para que se sientan más a gusto y se lleven una mejor impresión.
Resueltas estas cuestiones más técnicas y de diferencias de cultura empresarial, podemos ponernos manos a la obra con la exposición oral en inglés en sí. Escoge una plantilla para la presentación sencilla y muy visual, que de protagonismo a los gráficos, para hacer una presentación dinámica y que no sea aburrida. Hay que prestar atención especial a las cuestiones gramaticales, utilizando un inglés lo más perfecto que podamos. No te preocupes tanto por cuestiones como el acento al fin y al cabo, es algo normal, sino porque los tiempos verbales sean correctos y coherentes, por utilizar los tecnicismos adecuados, por hacer un buen uso de los adverbios y adjetivos…
En este sentido, siempre es interesante hacer un pequeño ensayo y trabajar diversas técnicas para hablar en público junto a los compañeros de la empresa que te acompañen en la presentación o que trabajen codo a codo contigo. Además del lenguaje y las palabras complicadas, nos fijaremos en el uso de los recursos tecnológicos que tenemos a nuestra disposición, sobra decir que repasaremos las diapositivas para asegurarnos de que todo está bien escrito y en el lenguaje corporal. Aunque suelas hablar rápido en español, en esta presentación utilizaremos una velocidad moderada al hablar para evitar problemas.
Cómo responder a las preguntas en una presentación en inglés
Ya sea al finalizar tu presentación o durante tu exposición, es probable que al público le entren dudas y quiera hacer una pregunta o introducir matices. Es un momento crítico en cualquier exposición oral en inglés, ya que la respuesta exige premura y corrección, pero no tenemos tiempo para prepararla. Por eso, siempre es recomendable preparar una lista con posibles preguntas y su respuesta, de forma que no dejemos nada al azar.
Esta lista puede hacerse a partir de las dudas que pueda tener el “público” de nuestros ensayos, que también debería hacernos preguntas no preparadas para comprobar nuestra reacción. De esta forma nos acostumbramos a responder ante una situación donde es vital mantener la calma y no responder de forma precipitada o errónea. Siguiendo estos consejos, estarás más que preparado cuando te toque salir al escenario y enfrentarte a esa exposición oral en inglés que antes tanto te asustaba.